Demuestran que el running no daña las articulaciones de la rodilla
En muchísimas oportunidades hemos escuchado que “correr hace mal a las rodillas”, que “las arruina”, que “las daña”, y comentarios similares.Cómo este tipo de comentarios suelen ser repetidos una y otra vez, es normal que muchas personas lo tomen cómo una verdad absoluta y crean que, efectivamente, correr daña nuestras rodillas.
Ante ello, esta suele ser una de las excusas más utilizadas para no comenzar a correr (o dejar de hacerlo). Imaginen la escena, cualquier mañana de domingo, en un camino de montaña. Un corredor adelanta a un caminante y, mientras levanta educadamente la mano para saludar, piensa: "a tres por hora, la salud no mejora". El caminante, por su parte, contesta educadamente al saludo y piensa: "correr sin mesura, lesión segura".
¿Cuál de los dos dirían que tiene razón?
Para la salud, ¿es mejor correr o caminar?... La respuesta, según los escasos estudios científicos que han analizado esta cuestión y según los especialistas entrevistados para este reportaje, es que depende. Depende de qué aspecto de la salud se quiera cuidar y depende del estado físico y de las preferencias de cada persona. Lo que es mejor para una persona físicamente activa, que dispone de poco tiempo y que disfruta de descargas masivas de endorfinas no será lo más adecuado para otra persona que ha llevado una vida sedentaria, que tiene sobrepeso y a quien el médico acaba de recomendar que haga ejercicio.Pero en ambos casos el beneficio aumenta cuanto mayor es la distancia recorrida. "Si el gasto de energía es equivalente, un ejercicio moderado como caminar y un ejercicio vigoroso como correr producen reducciones de riesgo similares", concluyen los investigadores. Estos resultados demuestran que uno no necesita esforzarse en ir muy rápido para reducir de manera significativa su riesgo cardiovascular."Una buena opción es correr los días que tenemos poco tiempo y caminar los días que tenemos más".
Ultimas investigaciones acerca de la conveniencia de correr
Una investigación científica defiende que el running no solo no contribuye a desgastar las articulaciones de la rodilla, sino que además puede actuar como factor de prevención para dolores en esta zona.
En un reciente estudio publicado en European Journal of Applied Physiology se encontró que correr largas distancias no causa inflamación en las rodillas , contrariamente a una creencia popular muy establecida. Es más, para los científicos ,las moléculas pro-inflamatorias responden de manera contraria, ya que en realidad se reducen en la articulación de la rodilla después de ejercitarse.
Los investigadores de la Universidad Brigham Young (EE.UU.) extrajeron líquido sinovial y muestras de suero a cada uno de los 15 voluntarios, un grupo de hombres y mujeres sanos, y de edades entre 18 y 35 años. Este proceso lo hicieron antes de la actividad y lo repitieron tras la carrera, de 30 minutos. Al finalizar la prueba midieron los marcadores de inflamación en el líquido de la articulación de las rodillas.
Al comparar los especialistas encontraron que los marcadores de inflamación se mantuvieron en niveles similares y los marcadores específicos que buscaron en el líquido sinovial extraído, dos citoquinas nombrados GM-CSF e IL-15, se redujeron en la concentración de los sujetos, de acuerdo a los fluidos que se extrajeron antes y después de la media hora de entrenamiento.
Los investigadores dijeron que los resultados del estudio indican que el ejercicio puede funcionar como medicamentos condroprotectores, ayudando a retrasar la aparición de enfermedades degenerativas de las articulaciones tales como la osteoartritis o artrosis , la enfermedad dolorosa en la cual el cartílago en el extremo de los huesos se desgasta y gradualmente empeora con el tiempo.
“Se va en contra de la intuición. La idea de que la carrera de larga distancia es malo para las rodillas podría ser un mito . Este estudio no indica que los corredores de fondo son más propensos a la osteoartritis que cualquier otra persona. En lugar de ello, la investigación sugiere que el ejercicio puede ser un tipo de medicina”, dijo el Dr. Matt Seeley, autor principal del análisis.
En resumen: El running por sí mismo, no tiene porqué ser dañino para tus rodillas. Sin embargo, cometer errores en la técnica de carrera y/o en la forma de entrenar, puede aumentar el riesgo de lesionar tus rodillas y otras tantas partes de tu cuerpo.Sé inteligente, escucha tu cuerpo y no te dejes arrastrar por la ansiedad de entrenar demasiado rápido o mas kilómetros de los que tu cuerpo puede tolerar.Recuerda que la clave para convertirte en un mejor corredor, es la constancia.